Es la energía obtenida del viento, es decir, la energía cinética generada por efecto de las corrientes de aire, y que es transformada en otras formas útiles para las actividades humanas.
Ha sido aprovechada desde la antigüedad para mover los barcos impulsados por velas o hacer funcionar la maquinaria de molinos al mover sus aspas. Es utilizaad habitualmente principalmente para producir energía eléctrica mediante aerogeneradores. A finales de 2007, la capacidad mundial de los generadores eólicos fue de 94.1 gigavatios. La energía eólica es un recurso abundate, renovable, limpio y ayuda a disminuir las emisiones de gases de efecto invernadero al reemplazar ermoeléctricas a base de combustibles fósiles, lo que la convierte en un tipo de energía verde. Sin embargo, el principal inconveniente es su intermitencia.
La energía del viento está relacionada con el movimiento de las masas de aire que se desplazan de áreas de alta presión atmosférica hacia áreas adyacentes al gradiente de presión. Los vientos son generados a causa del calentamiento no uniforme de la superficie terrestre por parte de la radiación solar. Gracias al viento, se mueven los aerogeneradores, mueve una hélice y mediante un sistema mecánico se hace girar el rotor de un generador, normalmente un alternador, que produce energía eléctrica. Para que su instalación resulte rentable, suelen agruparse en concentraciones denominadas parques eólicos.
La energía eólica, como cualquier tecnología de energía, las plantas de energía eólica tienen algunos efectos en el medio ambiente. Mientras que las turbinas eñolicas no usan ningún tipo de combustible (más que el viento) y no contaminan durante su operación regular, si hay algunos riesgos que están asociados a su construcción y a su operación. Ya se han registrado alrededor de 40 muertes relacionadas con la contrucción, instalación y operación de turbinas eólicas. Al mismo tiempo, la instalación y opreación de las turbinas eólicas pueden tener un impacto negativo en las aves y otro tipo de vida silvestre debido a la invasión de su medio ambiente pos sus gigantescas turbinas.
España ocupa el cuarto puesto mundial en energía eólica, con un potencial estimado para los próximos años. El sector de energía en España se caracteriza por el alto grado de crecimiento industrial, lo cual explica un aumento en la demanda de producción de energía. Podemos destacar también en otras comunidades como Galicia, Castilla-León, Cantabria... Se estima que podrían existir en España 6000 MW eólicos.
